Hace casi cinco años, en el mes de mayo de 2017, el centrista y europeísta Emmanuel Macron y la ultraderechista Marine Le Pen se enfrentaron en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Francia, en un duelo que parecía decidido desde el principio. Esta vez, la historia, ¿Se repite?
Mismos protagonistas, con un enfoque electoral diferente. Esta vez, Emmanuel Macron no puede encarnar el papel de outsider, aprovechado por la derecha de Marine Le Pen, para poner en la batalla de urnas los dos polos antagónicos: la casta política versus el pueblo.
El actual presidente se enfoca en la falta de experiencia de su rival para gobernar un país tan complejo como lo es Francia, así como en sus principales logros de gestión y continuidad.
Disputa entre un liberal económico, ferviente defensor de la Unión Europea y una política euroescéptica antinmigración que busca reforzar e impulsar los llamados “valores franceses” y los conceptos que han sostenido a la República Francesa.
Reñida campaña electoral. De ganar Macron, sería el primer presidente que revalida en el cargo en los últimos 20 años.
Emmanuel Macon, el ex outsider:
Cargo actual: Presidente de Francia desde el año 2017.
Procedencia: ex banquero. Reemplaza a Arnaud Montebourg en el cargo de ministro de Economía, Industria y Asuntos Digitales. Durante su tiempo como ministro de Economía, impulsó la llamada «Ley Macron». Trabajó en la campaña presidencial de Francois Hollande en 2012.
Edad: 44 años. Fue electo a los 39, como el presidente más joven de la historia de Francia.
Partido político: La República en Marcha. Centrista.
Su lema: unir al pueblo francés, sin importar si son de derecha ni de izquierda. Eslogan de campaña: «Todos nosotros».
Para Macron, el objetivo estos días será convencer a los votantes, apáticos y sin la energía de 2017, de que él tiene una visión para Francia; intentar que su país sea una «nación más independiente en una Europa más fuerte».
Insistirá en que, en un contexto de guerra en Europa, pueden confiar en el mandatario para gestionar las crisis de los próximos años.
Intentará retratar a Le Pen como una candidata inexperta en la gestión, amiga de la Rusia de Vladímir Putin en la política internacional y ultraderechista en la ideología. Su acceso al poder, argumentarán los macronistas, representaría un peligro para Francia y Europa.
Marine Le Pen, la extrema derecha
Cargo actual: Diputada de la Asamblea Nacional desde el 2017.
Procedencia: Ex presidenta de la Agrupación Nacional. Fue diputada del Parlamento Europeo, Consejera Regional y Consejera Departamenal. Es la tercera vez que concurre a unas presidenciales y la segunda en la que llega a la segunda vuelta.
Su padre, Jean-Marine Le Pen fue presidente del Frente Nacional y candidato presidencial en viarias ocasiones.
Edad: 53 años.
Partido político: Agrupación Nacional (derecha y extrema derecha).
Su lema de campaña: «Mujer de estado».
La candidata promete una reformulación profunda de la relación de Francia con la UE, una alianza con Rusia y un cambio constitucional que le daría manos libres para aplicar políticas más duras contra los inmigrantes y restaría derechos a los extranjeros que viven en Francia. Su campaña se ha centrado no en cuestiones tradicionales de la extrema derecha como la identidad, la inmigración o la inseguridad, sino en la subida de precios y en las medidas para aumentar salarios y llegar a fin de mes.
El objetivo de Le Pen es, por un lado, captar el voto del malestar y el descontento con un presidente que una parte de la población ve como un hombre elitista y arrogante. Del otro, afianzar una imagen que lleva años cultivando y que en esta campaña parece haber conectado con una parte significativa del electorado. Ella se presenta como una líder próxima a los franceses de a pie, amable y humana, con un discurso mucho más suavizado en comparación con el año 2017.
Resultados de la primera vuelta
Macron recibió votos de la derecha moderada y la izquierda moderada: ciudadanos asustados por la posibilidad de que Le Pen fuese la más votada y reforzase sus opciones de ser presidenta. Votantes de la izquierda más hostil al actual presidente concentraron su voto en Mélenchon. Y quienes habían sentido simpatías por Éric Zemmour, el tertuliano ultra que durante meses disputó el liderazgo de la extrema derecha a Le Pen, votaron a Le Pen.
La ventaja de Macron con Marine, es superior a la primera vuelta del 2017.
Resultados primera vuelta
Ganador de la primera vuelta por departamento. Año 2017
Ganador de la primera vuelta por departamento. Año 2022
¿Quiénes lo votan?
El actual presidente y candidato del partido ¡La República en Marcha! ha sido el más votado en 52 de 106 departamentos del país, ocho departamentos más que en los anteriores comicios en 2017. Emmanuel Macron ha conseguido superar sus apoyos y ha logrado aumentar el porcentaje de votos recibidos en casi cuatro puntos.
Macron triunfa entre los votantes de más de 70 años. Por su parte, Marine cuenta con mayor apoyo en la franja de mediana edad (35 a 59 años).
El presidente Macron recoge uno de cada tres votos de la población francesa más formada, de clase alta, empata prácticamente con Le Pen con aquella que cuenta con Bachillerato y pierde entre quienes no han estudiado, que prefieren a la candidata de extrema derecha.
Marine Le Pen, ha dejado de ser la principal candidata en cinco departamentos. A pesar de haber aumentado el número de votos recibidos, la candidata de Agrupación Nacional ha pasado de ser la política más votada en 47 departamentos a serlo en 42.
¿Claves para la segunda vuelta?
La abstención:
En esta primera vuelta, la abstención se ha situado en el 26%. Se espera una mayor participación para el balotaje, que será el Domingo 24 de Abril.
Melenchon, el tercero en discordia.
La misma noche electoral de la primera vuelta, Mélenchon, el candidato de Francia Insumisa, dejó un mensaje claro para su electorado: «¡No hay que darle un solo voto a Marine Le Pen!» Aunque tampoco sugirió explícitamente darle el voto a Macron.
Los electores que han hecho de la formación de Mélenchon el partido más consolidado de la izquierda se enfrentan ahora a un dilema. Abstenerse, votar a regañadientes por quienes muchos en este campo consideran “el presidente de los ricos” para impedir el triunfo de la ultraderecha o incluso darle su sufragio a Marine Le Pen.
Un 33% de los simpatizantes de Melenchon tienen la intención de votar a Macron, mientras que un 16% a Le Pen, y un gran 51% no manifestó su intención a votar.
Sondeo para el balotaje
A tan solo días de la elección que definirá el rumbo del país por los próximos cinco años, los sondeos dan a Macron como ganador con el 55,5%. Por su parte, vaticinan un 44,5% para la derechista Marine.
Misma historia, diferente contexto. Reñida y ajustada elección. ¿Continuidad o cambio? ¿Francia o Europa? ¿Extrema derecha o centro? ¿Qué decidirán los franceses?